Las TIC han traído avances maravillosos, pero también han abierto la puerta de la habitación de nuestros menores a riesgos que antes no existían. Mientras que el acoso escolar suele ser visible en el aula, existen peligros silenciosos que ocurren exclusivamente en la pantalla y que tienen connotaciones mucho más graves: los riesgos de índole sexual.
En AFOE, tras formar a más de 100.000 personas en el ámbito educativo y social, detectamos una confusión habitual entre familias y docentes: meterlo todo en el mismo saco.
Nuestro equipo multidisciplinar ha elaborado esta guía para separar el grano de la paja. Aquí aprenderás a diferenciar el sexting (una práctica de riesgo entre iguales) del grooming (un delito cometido por un adulto), y te daremos las claves para actuar antes de que sea tarde.
¿Qué es el Sexting? La trampa de la intimidad digital
El término sexting proviene de la unión de sex (sexo) y texting (envío de mensajes).
Se define como el envío voluntario de contenidos de tipo sexual (fotografías o vídeos) producidos por quien remite, generalmente a través de mensajería instantánea (sexting chat) o redes sociales.
El riesgo: De la confianza a la “Sextorsión”
Es crucial entender que, en el origen del sexting, suele haber consentimiento. La persona menor envía la foto a su pareja o a alguien que le gusta como un juego o prueba de confianza.
El problema surge cuando se pierde el control de esa imagen. Lo que empieza como un secreto entre dos puede acabar en pantallas de todo el instituto en minutos. Esto deriva a menudo en sextorsión: el chantaje de publicar más fotos si no se envía dinero o más contenido sexual.
¿Qué es el Grooming? El engaño del perfil depredador
Si el sexting es peligroso, el grooming es un delito penal.
El grooming (o ciberengaño pederasta) es el conjunto de estrategias que utiliza una persona adulta para ganarse la confianza de un menor a través de internet con el fin último de obtener concesiones de índole sexual (imágenes, vídeos o un encuentro físico).
Las Fases del Grooming: Cómo opera el perfil depredador
La persona acosadora no ataca de inmediato; sigue un proceso de manipulación psicológica muy estudiado:
- Fase de Amistad: Se acerca a la persona menor en foros o juegos online fingiendo tener su misma edad o intereses comunes.
- Fase de Relación: Convence a la persona menor de que su familia “no le entiende” y le pide que su relación sea un secreto (“nuestro pequeño secreto”).
- Fase de Inicio del abuso: Introduce temas sexuales sutilmente en la conversación para normalizarlos.
- Fase de Agresión Sexual: Una vez tiene una foto o un dato comprometedor, empieza el chantaje.
Diferencias clave entre Sexting y Grooming
Para actuar correctamente desde el centro educativo o la familia, es vital saber a qué nos enfrentamos.
| Característica | Sexting | Grooming |
| Participantes | Generalmente entre iguales (menores). | Adulto vs Menor. |
| Origen | Suele haber voluntad inicial (deseo/presión social). | Engaño y manipulación desde el inicio. |
| Delito | La difusión sin consentimiento es delito. | El mero acto de embaucar al menor es delito penal. |
| Dinámica | Búsqueda de validación o intimidad. | Estrategia depredadora planificada. |
Señales de Alerta y Prevención Educativa
Prohibir el móvil no es la solución; la educación afectivo-sexual sí lo es. Como expertos en formación continua3, recomendamos estar atentos a estas señales:
- Secretismo excesivo: El menor cambia de pantalla o esconde el móvil cuando entras en la habitación.
- Regalos inexplicables: Aparecen saldo en juegos, skins o regalos físicos que el menor no puede costear (típico del grooming).
- Ansiedad digital: Nerviosismo extremo si no tiene acceso a internet o al recibir notificaciones.
Cómo actuar
- No juzgar: Si tu hijo/hija ha hecho sexting, regañarle solo hará que no te cuente si le extorsionan. Necesita apoyo, no juicios.
- Guardar pruebas: En caso de grooming, nunca borres las conversaciones; son la evidencia para la Brigada de Investigación Tecnológica.
- Denunciar: El grooming debe reportarse inmediatamente a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Proteger a través del conocimiento
Los riesgos TIC como el sexting y grooming no se combaten con miedo, sino con confianza y formación. En AFOE, trabajamos para dotar a la comunidad educativa de las herramientas necesarias para detectar estos abusos a tiempo.
Si el conflicto que has detectado no es de índole sexual, sino de violencia entre compañeros, te recomendamos consultar nuestra Guía de Protocolos de Acoso Escolar y Ciberacoso para saber cómo proceder.
Si buscas una formación que entienda tus necesidades y te ofrezca garantías, consulta nuestro catálogo de cursos homologados. Contamos con cursos homologados por administraciones educativas públicas y universidades diseñados para sumar valor real a tu baremo y a tu futuro profesional.
PREGUNTAS FRECUENTES (FAQs)
-¿Es delito hacer sexting si ambos son menores?
El envío de fotos propias no es delito. Sin embargo, difundir esas fotos a terceros sin consentimiento (reenviarlas por WhatsApp) sí es un delito de revelación de secretos, incluso siendo menor de edad (responsabilidad penal a partir de los 14 años).
-¿Cómo puedo saber si el perfil con el que habla mi hijo o hija es falso?
Es difícil, pero hay indicios: perfiles con pocas fotos, que solo siguen a menores, que piden cambiar a chats privados rápidamente o que hacen preguntas muy personales demasiado pronto. En caso de duda, la herramienta de “búsqueda inversa de imágenes” de Google puede ayudar a ver si la foto de perfil es robada.
-¿Cuál es la diferencia con el Ciberacoso?
El ciberacoso busca humillar y dañar socialmente a la víctima. El grooming busca satisfacción sexual de la persona adulta. El sexting busca intimidad (aunque salga mal). Si quieres profundizar en el acoso entre iguales, revisa nuestro artículo sobre protocolos de ciberacoso.
